Serguéi Tanéyev fue un compositor ruso; alumno y amigo del buen Tchaikovsky. Característico de su estilo es alejarse de la corriente nacionalista del famoso grupo de “Los Cinco”. En cambio Tanéyev, prefiere gran formalidad, acercándose más al estilo alemán. La mejor de sus cualidades según muchos: su destreza en contrapunto. No es un compositor ruso tan conocido como los grandes nombres pero como es frecuente el caso, hay muchas joyas musicales que su exploración nos aguarda.
Creo que una excelente manera de descubrir a este compositor es con su Opus 1, la Cantata “Juan de Damasco” que según esto, también es conocida como “Un réquiem ruso”.
No hay mucho que explicar de esta obra. Es una obra coral de poco más de veinte minutos que cautiva al instante y termina sintiéndose como de 5 minutos. Lo que más me gusta es la facilidad que Tanéyev tiene, desde los primeros compases, de imponer su atmósfera emocional. Me refiero a esa melancolía espiritual y profunda que en mi opinión deja como novatos a muchos minimalistas sacros de nuestra época.
Esta obra empieza con un enorme y conmovedor adagio, seguido de un andante prácticamente para coro a cappella. Todo esto para culminar con su fuerte: Una fuga, que sin pena nos muestra el amor por la música de Bach y demás compositores antiguos. Después de hacernos pasar por emocionantes pasajes, la obra cierra con un suave y hermoso lamento de las voces, dando el “efecto réquiem” perfecto. Nunca perdemos la atención, Tanéyev nos sumerge en un trance religioso que nos reconforta una vez finalizado.
Afortunadamente hay una versión en vivo en Youtube, que aquí comparto. No se la pierdan.
Sabría donde conseguir la letra de esta cantata. Gracias
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